Entrevistando a…
Pepe García
Fundado en 2002 y actualmente bajo la dirección de su socio fundador Pepe García, CuldeSac se ha consolidado a nivel nacional e internacional como un estudio de diseño integral especializado en la transformación creativa de las marcas y de sus negocios a través de experiencias innovadoras y soluciones únicas tanto en proyectos de retail como de producto y branding estratégico.
¿Cuál es el objetivo de su marca para los próximos 5 años?
Si bien somos una marca referente dentro del mercado gracias a nuestra expertise en el sector retail, nuestro objetivo a mediano y largo plazo es potenciar la capacidad global del estudio y forjar una comunidad abierta al mundo, con la intuición natural para recoger talento en todos los rincones del planeta y crear un ecosistema de expertos y profesionales capaces de trasladar esa fuerza arrolladora a cada proyecto. Buscamos, en definitiva, la consolidación como laboratorio creativo y estratégico para abordar los desafíos de nuestros clientes por medio de un enfoque 360 capaz de leer la especificidad de cada tipo de modelo de negocio y traducirlo en acciones transformadoras en toda la cadena de valor, trabajando en el límite entre lo físico y digital.
¿Qué los hace diferentes?
Nuestro trabajo, independientemente de su escala y tamaño, busca impactar, emocionar y perdurar en la mente de nuestros clientes a través de planteamientos atrevidos y resultados audaces. En este sentido asumimos una fórmula de trabajo que incorpora en cada fase la conceptualización estratégica y la suma colaborativa de visiones interdisciplinares, acompañando al cliente en la decodificación de sus necesidades puntuales para cada fase. Esta forma de entender nuestro trabajo se nutre de un espacio abierto de exploración y experimentación donde la unión de perfiles variados multiplica y potencia al equipo y permite ofrecer soluciones innovadoras y disruptivas.
¿Qué iniciativas están desarrollando relacionadas con la sostenibilidad?
Estamos viviendo un período de muchos interrogantes que nos llevan a replantear nuestra verdadera función como diseñadores y la responsabilidad que tenemos como catalizadores y promotores de una mejor calidad de vida a través de nuestros proyectos.
Entendemos que nuestro compromiso con la sostenibilidad es doble. Como ciudadanos de este mundo y como profesionales del diseño debemos abordar el proceso creativo de forma responsable durante todas sus etapas para ofrecer así diseños -tanto en retail como en productos- que ayuden a cambiar el paradigma dentro del sistema productivo. Ya sea desde el uso de materia prima reciclada o la aplicación de premisas más ecológicas en los modos de confección y venta, intentamos incorporar esta filosofía permanentemente y guiar a nuestros clientes hacia una ruta más sostenible.
Desde hace mucho tiempo venimos trabajando mano a mano con varios clientes en proyectos que incorporan este enfoque:
- El casco plegable desarrollado para Closca ha sido un claro ejemplo de nuestra apuesta por la movilidad sostenible. Se trata de un ejercicio de diseño que transforma un simple casco en un accesorio urbano seguro, práctico y elegante que interpela exitosamente a usuarios con un estilo de vida y una búsqueda de movilidad más sostenible.
- Colaborando activamente con Freshly Cosmetics en el lanzamiento de soluciones basadas en los principios de la economía circular, el uso de materiales reciclados y reciclables tanto en producto como en packaging.
Trabajando junto a retailers con implantación mundial, como Bershka en el desarrollo de soluciones expositivas que incorporan un diseño más ecológico en todas sus tiendas.
¿Cuál es vuestro concepto de experiencia innovadora?
La innovación plantea siempre una búsqueda de mejora, un punto evolutivo más allá de lo establecido que a veces logra trascender los límites y ofrecer experiencias verdaderamente disruptivas. Hoy por hoy vivimos en un mundo de transformación constante, donde condicionantes como la tecnología, la ecología y la sociología no solo contribuyen a acelerar ese factor de cambio a velocidades insospechadas, sino también a agilizar nuestra capacidad de adaptación a esos cambios. En este contexto, el concepto de “experiencia“ ha perdido su verdadero sentido: la experiencia de marca no es más que la definición de una relación, un pacto que establece los términos y campos de acción entre una marca y sus seguidores.
Antiguamente, las limitaciones técnicas también limitaban esa capacidad de comunicación entre las marcas y sus consumidores. Sin embargo, los nuevos avances y cambios de paradigmas han acortado drásticamente esa distancia, colocando ambos actores en una relación simétrica, bidireccional y es así como entendemos y abordamos las “experiencias innovadoras”. En nuestro trabajo, la búsqueda de “experiencias innovadoras” es la búsqueda de relaciones bidireccionales entre las marcas y sus seguidores, dinámicas que sean profundamente significativas para el día a día de ambos.
Estrategias de drive to store de CuldeSac
Estamos alcanzando el apogeo de la omnicanalidad: actualmente la mayoría de los compradores visitan una tienda física tras haber buscado previamente información online acerca del producto o servicio en el que están interesados.
Hay una investigación digital previa que ya está naturalizada dentro del proceso de compra. Para responder a estos nuevos comportamientos por parte del consumidor, nosotros apoyamos orgánicamente a nuestros clientes, acompañándolos en la redefinición de estrategias de negocio que complementen ese proceso. Esto incluye desde la conceptualización y el diseño de tienda, al apoyo en branding y diseño digital, ofreciendo así una estrategia integral capaz de anticipar las posibles acciones que guiarán al potencial cliente al punto de venta final.
La estrategia consiste, en definitiva, en saber responder eficientemente a las expectativas de un consumidor exigente y super informado y generar una experiencia que lo coloque como protagonista de cada interacción.
¿Cuál es vuestro concepto de Tienda del Futuro?
Para nosotros la clave no consiste en hablar de tiendas del futuro sino más bien en marcas del futuro. La música, por ejemplo, siempre ha sido y será un objeto de consumo cultural con entidad propia e independiente de sus canales y soportes de disfrute. La música es a las marcas, lo que los vinilos, los CDs y Spotify es a las tiendas. Nuestra misión como diseñadores consiste en entender qué tipo de relaciones buscan establecer las marcas con sus seguidores, cómo van a estar presentes en sus vidas. Estamos asistiendo al fin de una época que podría catalogarse como “banal” o “frívola”. Es hora de parar y reflexionar cómo recuperar el orden y equilibrio natural. Ese es el verdadero desafío que nos espera.
También hay que entender, si hablamos específicamente de las tiendas, que éstas ya no se ven como lugares transaccionales sino relacionales. Se trata de un destino físico creado para atraer clientes a través de experiencias emocionales que estimulen sus cinco sentidos. Desde el punto de vista del diseño estratégico, una tienda exitosa será aquella capaz de incentivar positivamente esa necesidad de experimentar, inspirar e incluso “entretener” al cliente; con la capacidad de ofrecer la personalización que ya encuentra en el mundo digital pero con la calidez humana que solo es posible en el mundo real. Esto se dará de forma orgánica en todo el espacio de la tienda, ya sea facilitando el testeo de productos o servicios u ofreciendo al comprador un entorno exclusivo y lleno de estímulos extras que permita establecer una relación más sólida y enriquecedora con la marca y sus valores.
Si bien la evolución del e-commerce seguirá ofreciendo mejores interfaces y posibilidades de monitorización y testeo, el cliente no puede sentir y vivir en una web todas las oportunidades que ofrece la experiencia física. Es por ello que nuestra responsabilidad como diseñadores será la de ofrecer, y en definitiva complementar, aquellas oportunidades que en el mundo digital suponen una limitación, profundizando el uso de tecnologías que aporten información para entender la experiencia de compra ideal para cada usuario.
¿Cómo mejorar el mundo del retail post pandemia?
El retail post pandemia tendrá que centrarse más en el cliente que en el canal.
Durante la crisis de la COVID, hemos sido protagonistas y testigos de cómo los clientes han comenzado a moverse con mucha mayor fluidez entre interfases físicas y móviles. Frente a este salto digital, el desafío será encontrar nuevas formas de ofrecer a los clientes algo único o especial para fomentar nuevamente el tráfico a la tienda física.
El mundo del retail deberá perfeccionar la omnicanalidad para lograr una efectiva escalada post COVID, manteniendo una coherencia entre la experiencia online y offline, tanto a nivel producto como experiencia de usuario. A medida que el viaje del consumidor se complejiza y sus demandas multiplataformas se tornan más difíciles de atender o cumplir, tendremos que estar pendientes de esos cambios en los comportamientos y recorridos hasta el proceso de compra final para brindar un servicio perfecto en todos los canales. Monitorear el comportamiento on-line de los consumidores para entender sus intereses y gustos es una práctica cada vez más consolidada, pero el desafío también reside en desarrollar más tecnologías que permitan entender el comportamiento dentro de la tienda física. La innovación seguirá siendo clave para lograrlo, con diseños que incluyan las posibilidades del mundo digital y toda la información que nos aporta acerca del cliente y sus hábitos, para poder ofrecer experiencias más efectivas.
Otro elemento clave a revisar será la seguridad. Si algo nos deja esta pandemia, es la necesidad de priorizar espacios diseñados con los protocolos de seguridad y confort que faciliten la circulación, dinamicen la logística y minimicen cualquier tipo de riesgo; permitiendo a los clientes sentirse lo suficientemente cómodos como para volver – esa será de aquí en más la máxima que regirá el diseño.